Es fundamental que los niños a partir de los cuatro años de edad se hagan revisiones periódicas en el podólogo ya que una correcta estructura ósea y morfológica del pie y una correcta Biomecanica asegurarán , en el futuro, un buen desarrollo de las tres articulaciones de las piernas (caderas, rodillas y tobillos) y una adecuada posturología del niño.

Los más pequeños son vulnerables a padecer ciertas patologías en su etapa de crecimiento que en nuestro centro prestamos una especial atención a la fase de desarrollo infantil.

No debemos olvidar que el niño está en una fase de crecimiento y formación, y por tanto, las alteraciones que pueda presentar se pueden consolidar en esta fase para hacerse permanentes en la etapa adulta. Por eso una alteración del apoyo plantar también afectará a la colocación de la rodilla y cadera ocasionando alteraciones posturales permanentes que se manifestarán cuando sea adulto.

Una de las patologías más frecuentes en la edad infantil es la hiperlaxitud ligamentosa, que provocan un pie valgo.Son niños torpes que no les gusta realizar ejercio y por ello muchas veces padecen de sobrepeso.

Un correcto diagnóstico y tratamiento de las alteraciones estructurales y/o funcionales en pies y piernas de los niños ( pies planos o cavos, pies valgos o varos, geno valgo, etc. ) es básico para permitir que el niño se desarrolle y crezca correctamente.

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